Nos ha dicho el visitador general en su protocolo de la visita de mayo 2022, con relación a la formación permanente que: “La situación cambiante de la sociedad y la política de Chile requiere respuestas nuevas y creativas de nuestra parte. El creciente ambiente indiferente y secularizado afecta nuestra misión”.

Así expresado, nos ponemos manos a la obra luego de algunos intentos aislados para abordar esta preocupación. En tal sentido, la dirección provincial de Chile ha constituido un equipo para esta área. El equipo está constituido por Alejandra García-Huidobro, psicóloga y con vasta experiencia en acompañamiento a comunidades de religiosos, la Hna. Sandra Henríquez, (Carmelita Misionera) directora de formación de CONFERRE y José Miguel Alvarado, svd, recién nombrado responsable de esta área en la provincia.

Por cierto, revisando nuestras constituciones recordamos que: “Todos los miembros de la comunidad necesitan y son responsables de seguir la formación permanente, tanto individual como colectivamente.” (Const. 105)

Y en este contexto fue que durante toda la mañana y hasta el mediodía del jueves 7 de septiembre durante la asamblea provincial nos propusimos llevar adelante algunas acciones que permitan iniciar el proceso.

Para ello nos aproximamos al asunto considerando aspectos relevantes para el aprendizaje. En tal sentido, una persona para aprender necesita de un entorno y motivación para ello. Y tal entorno, que es la comunidad, necesita conocerse. De esa manera, dedicamos una buena parte a una actividad en pares para un intercambio de aspectos personales. Esto ha sido muy valorado pues muchos llevando años en la provincia no se conocen o no han tenido ocasión de hablar de estos asuntos más personales. Todos participamos de ese espacio sagrado movidos por la generosidad en lo compartido y en la escucha.

Seguidamente, hicimos un sondeo sobre las maneras en que actualmente cada uno continúa aprendiendo y estas preguntas que siguen:

¿De qué manera y por qué métodos estás buscando oportunidades para tu crecimiento humano, espiritual y carismático?

¿Cómo podemos llegar a una comprensión más sólida de la necesitad de la formación continua, su seguimiento y evaluación?

¿Qué temáticas consideras prioritarias para tu formación hoy?

Una vez realizado este trabajo personal, nos reunimos en grupos para compartir y sintetizar las principales ideas para armar un proceso de formación continua (preferimos hablar de formación continua en lugar de permanente. Le da mayor dinamismo esta expresión).

La tarea que sigue es recoger todos los trabajos grupales para armar una propuesta de formación continua a la provincia que respete las edades, necesidades, preocupaciones.

P. José M. Alvarado B., svd