*Por: P. Leonito de Jesús SVD

El sabado 2 de abril comenzó el Ramadán, mes sagrado para los musulmanes en el que ayunan y oran. En ese contexto, presentamos el siguiente artículo escrito por el P. Leonito de Jesús SVD, misionero en Chile y  procedente de Indonesia en el que relata la relación entre los misioneros del Verbo Divino y los musulmanes en su país.

La misión en otro sentido se puede entender como un diálogo con los demás. Si leemos  la historia de Jesús de Nazaret, nos percatamos de que Él realmente vino a establecer un diálogo ucon los demás sobre el Reino de Dios. Y no de los temas importantes que siempre se enfatiza en la misión de la SVD actualmente es el diálogo profético con los demás, es decir, con otras culturas y religiones, el diálogo con los que no tienen fe y el diálogo con los pobres.

Creo que la inspiración de este diálogo proviene de la propia misión de Jesús que siempre está abierta a cualquier persona de todos los antecedentes sociales: raza, cultura, nación e idioma. En principio, el diálogo profético con los demás no significa  convertirlos para que sean iguales a nosotros, sino para conocerlos, entenderlos, respetarlos y reconocer el valor, la verdad y la diferencia que tienen. El diálogo profético con los demás siempre nos exige una actitud de empatía, apertura, comprensión, participación, reconocimiento y el respeto hacia los demás con todos sus valores y la diferencia que existen en ellos.

Por eso, el diálogo profético presupone una relación recíproca entre las dos partes del diálogo. Por lo tanto, no es una conversación común en el comedor de un restaurante, sino un diálogo que requiere la empatía, el respeto, la comprensión, la apertura y la participación activa con otros. Allí se creará una dialéctica entre ambos. En esta dialéctica se sintetizarán la tesis y la antítesis de las dos partes, a fin de que pueda generar un diálogo vivo. En una síntesis, la tesis y la antítesis no se eliminan sino que se elevan a un nivel superior para que se igualen. En la síntesis se conservan las peculiaridades de la tesis y la antítesis.

En este sencillo artículo, quiero presentarles un ejemplo de diálogo profético que ha sido construido por los misioneros verbitas con los musulmanes en el sudeste de Asia, especialmente en Indonesia.

 Los musulmanes en Indonesia

La república de Indonesia es un país democrático formado por miles de islas. En ella hay miles tribus, razas, culturas, idiomas y creencias que conviven como una sola nación. Según el censo de población del año 2020, la población de Indonesia es 271,349,889 personas. La mayoría de esa población adhiere a la religión islámica (86,7%). Por lo tanto, Indonesia está registrado como el país musulmán más grande del mundo. Mientras tanto, los católicos son una minoría con el 3,12% de 271,349,889 de la población.

Como el país musulmán más grande del mundo, Indonesia es un «terreno fértil» para el crecimiento de nuevas sectas de los musulmanes. Hay varias sectas musulmanas y hubo varios grupos islámicos radicales, tales como el Frente de Defensores Islámicos, Hizbut Tahrir de Indonesia, Darul Islam o el Estado Islámico de Indonesia, Jamaah Asharut Daulah y Laskar Jihad. Estos grupos islámicos radicales han sido disueltos por el gobierno indonesio.

Los misioneros verbitas y su trabajo con los musulmanes

Indonesia es un país multicultural en que hay muchas razas, culturas, idiomas y religiones. Por lo tanto, el tema del diálogo profético con los demás, especialmente con los musulmanes es muy relevante. La pregunta es ¿cómo los misioneros verbitas pueden realizar un diálogo profético con los musulmanes que tienen una creencia muy diferente?

Para realizar este diálogo los misioneros de la provincia SVD Ende, Flores, empezaron a enviar a los seminaristas todos los años a realizar sus años pastorales en el internado islámico, Walisongo Ende. Esta misión se ha realizado desde 1997 hasta hoy en día. Por lo general, en el internado islámico Walisongo Ende, los seminaristas trabajan como profesores y supervisores de dormitorios para estudiantes musulmanes. El diálogo y las relaciones armoniosas entre la SVD y los musulmanes todavía se mantienen  hasta la actualidad, y creo que continuará.

Un seminarista del Verbo Divino con estudiantes islámicos

Por lo general, todos los años hay una fiesta de votos perpetuos o de ordenación sacerdotal o una gran fiesta de la SVD y en ellas siempre se invita a los estudiantes islámicos de Walisongo para que participen. Ellos siempre asisten a las fiestas religiosas de la Congregación del Verbo Divino con sus canciones y bailes islámicos. No solo eso.  Para fortalecer un diálogo más profundo y armonioso, el 2013 la provincia SVD Ende construyó una cocina grande y un comedor para más de 100 niños del internado islámico.

El diálogo fue construido con éxito por ambas partes debido a la apertura, la empatía, la comprensión y el respeto mutuo.

Entre los  años 2013 y 2014 el padre Superior General SVD anterior, P. Heinz Kulüke SVD, visitó el internado islámico, Walisongo, Ende, y él  vistió la ropa islámica.

Estudiantes islámicas del internado Wallisongo participan en una misa de profesión de votos perpetuos en el Seminario Mayor de Ledalero.

Una familia musulmana permite a su hijo ser sacerdote

Como Indonesia es el país musulmán más grande del mundo, dentro de una familia hay miembros musulmanes, católicos y de otras religiones. Muchas familias de los misioneros verbitas de Indonesia son musulmanas. Ellos pueden vivir juntos sin problema, y respetan la creencia de los demás. Lo más interesante es que la familia musulmana permite que sus hijos vayan al seminario para estudiar y ser sacerdotes en la Congregación del Verbo Divino.

 Siti Asiyah, una mujer musulmana, le permitió a su hijo para ser un sacerdote católico. El 10 de octubre de 2015 Siti Asiyah participó en la misa de ordenación de su hijo, el padre Robertus Belarminus Asiyanto, SVD en el Seminario mayor de la SVD en Ledalero, Flores, Indonesia. Actualmente el P. Robertus Belarminus SVD es formador de los novicios en el noviciado San José Nenuk, en la provincia SVD de Timor.

La señora Siti en la ordenación sacerdotal de su hijo en el Seminario Mayor Ledalero.

*Sobre el autor:

El padre Leonito Jesús Leto  SVD es  misionero procedente de Indonesia y actualmente sirve como vicario en   la Parroquia Sagrado Corazón de Jesús de Quepe en el sur de Chile.