Se trata del P. Erasmus Beghu SVD, quien inició su ministerio ante la comunidad parroquial el sábado 19 de marzo.

En una Eucaristía presidida por monseñor Julio Larrondo, obispo auxiliar de Santiago y vicario de la Zona Sur, el P. Erasmus Beghu inició su ministerio de párroco de la Parroquia Espíritu Santo de San Joaquín en la Región Metropolitana de Santiago.

En la toma de posesión -que se realizó ante la comunidad parroquial- también estuvieron presentes el párroco saliente, P. Armando Schnidryg SVD; el Viceprovincial, P. Sergio Edwards SVD, entre otros cohermanos y diáconos.

Nuevas misiones

 El P. Erasmus Beghu es un verbita procedente de Indonesia y hasta el momento de su nombramiento como párroco era vicario en la misma comunidad. Además, sirvió como responsable de la Pastoral Juvenil y Vocacional de la Provincia.

De ese modo, el P. Erasmus continuará acompañando a la Parroquia Espíritu Santo luego de 5 años de misión del P. Armando Schnidryg, quien a partir de ahora asumirá plenamente su rol de encargado de la Pastoral Mapuche de Santiago.

Historia

 La Parroquia Espíritu Santo fue creada por monseñor José María Caro, arzobispo de Santiago, el 16 de abril de 1942 y encomendada al cuidado de la Congregación del Verbo Divino. Actualmente cuenta con 4 comunidades de base y a lo largo de su historia se ha caracterizado por su compromiso pastoral y social con el entorno.

Entre algunos de los recuerdos de los parroquianos permanecen las inspiraciones a los equipos pastorales de las nuevas líneas pastorales del Concilio Vaticano II.  A la luz de ese proceso, se formaron grupos bíblicos en las casas donde se comentaba la situación de la gente y del país. Se organizaron misas y celebraciones en los pasajes de la población.

A principios de 1976 el P. Javier Peró SVD continuó esa misión manteniendo una pastoral viva con fuerte responsabilidad de los laicos, preocupándose de la acción social y comedores infantiles. Florecieron los grupos juveniles, carismáticos, de Legión de María junto a la Catequesis Familiar y a grupos de matrimonios. El P. Peró murió inesperadamente en febrero de 1983, lo que fue muy sentido por todos los fieles.

Le sucedió el P. Helmut Karrer, quien tuvo que enfrentar tiempos muy difíciles por el ambiente de protestas populares en contra  de la dictadura cívico- militar, lo que provocaba tensiones y divisiones que repercutían en la comunidad parroquial.

En 1985 asumió la Parroquia el P. Carlos del Valle. Durante estos años la comunidad parroquial tuvo que abrirse más a la difícil situación de represión y pobreza que sufría la población. Fueron años de redes solidarias y populares organizadas y animadas desde la Parroquia.

La visita del Papa Juan Pablo II a Chile en 1987, supuso un impulso pastoral muy fuerte. Crecieron las Comunidades de Base y las jornadas, cursos y talleres para jóvenes y adultos. La formación de los laicos fue una característica de la Parroquia Espíritu Santo durante los años posteriores y con los demás sacerdotes.

Realidad pastoral

Hoy por hoy los desafíos para la comunidad radican en la continuación de su labor pastoral en medio de los cambios que ha tenido el país, enfrentando los desafíos de una sociedad secularizada, con problemas de pobreza, violencia y presencia de drogas que afectan la vida familiar y social.