Se trata del padre Juan Meyer SVD, quien dedicó gran parte de su misión en Chile a servir a una población obrera.
“No es posible contar la historia de la población sin mencionar al padre Juan; es como si le faltara el corazón”. Así comienza su relato don Pedro Godoy, agente pastoral y habitante de la población San Gregorio de La Granja para referirse al legado del padre Juan Meyer SVD, quien sirvió por un periodo de 20 años en la comuna ubicada en el sur de Santiago.
A pesar de que han transcurrido 35 años desde su muerte, los pobladores no olvidan la entrega y compromiso del sacerdote. Razones hay de sobra, una de ellas es el trascendental rol que jugó el P. Meyer en la lucha contra la pobreza de un barrio habitado por obreros.
“Como misionero, servidor de Dios, se preocupó por el dolor, sufrimiento y la pobreza de los niños, hombres y mujeres de esta población”, reconoce Godoy.
El religioso, oriundo de Bélgica, también defendió con dedicación a los pobladores que eran perseguidos por los agentes de la dictadura militar.
A eso se suma su intenso despliegue pastoral para acompañar desde la fe a tantas personas desesperanzadas por los flagelos sociales.
Actual templo parroquial San Gregorio de La Granja.
Formación
El P. Juan vio en la formación de los niños un enorme potencial de transformación, puesto que estaba convencido de que una buena educación basada en principios cristianos daría a los jóvenes la oportunidad de vencer la pobreza y vivir con dignidad. Esa certeza lo motivó a emprender la construcción de un colegio y para ese fin recurrió a sus contactos en Bélgica.
Tras conseguir los fondos fundó en 1983 la Escuela Básica San Gregorio, conocido en la actualidad como Colegio San Gregorio de la Salle.
Junto con la edificación del establecimiento educacional el misionero patrocinó la construcción de la sede de la parroquia San Gregorio con sus respectivas capillas en las comunidades de base.
“Puedo dar testimonio de que una gran mayoría de jóvenes de los 70 a los 80 que conocimos y participamos con su pastoral al servicio de Dios hoy son personas con un servicio social cristiano vivo. Tenemos muchos profesores, abogados, técnicos, médicos, concejales y alcaldes”, relata don Pedro Godoy.
Memoria viva
Actualmente en la Parroquia San Gregorio existe una agrupación que mantiene viva la memoria en torno al P. Juan. Todos los años se reúnen a fines de agosto –esta vez lo hicieron de manera virtual- para recordar su pascua y dar inicio a las actividades conmemorativas por la fiesta patronal, el 3 de septiembre.
Así transmiten a las actuales generaciones la vida y obra del cura que compartió con ellos los sufrimientos, las alegrías y que hizo de su misión un don.
Sobre el P. Juan Meyer
El P. Juan Meyer nació el 27 de octubre de 1923 en una pequeña localidad de Bélgica en la frontera con Alemania. Fue ordenado sacerdote el 17 de agosto de 1947 y llegó a Chile el 5 de febrero de 1949 proveniente de Holanda donde hizo sus estudios teológicos.
Llegó a la población San Gregorio en 1965 y tras su establecimiento en la zona el cardenal Raúl Silva Henríquez le solicita hacerse cargo de la JOC (Juventud Obrera Católica), a la que dedicó gran parte de su ministerio.
*Con Información de Parroquia San Gregorio
